asamblea nacional cuba 6 580x407

Una amplia información sobre el Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático recibieron hoy los diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular en su Noveno Período Ordinario de Sesiones de la VIII Legislatura.

En presencia del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, los detalles sobre el particular los ofreció Elba Rosa Pérez Montoya, ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), en el Palacio de Convenciones de La Habana.

Conocida también como Tarea Vida, la iniciativa la aprobó en abril pasado el Consejo de Ministros, recordó Pérez Montoya al referirse a la norma para contrarrestar los daños que pudieran ocasionar en Cuba las modificaciones climáticas en los próximos años.

Sus antecedentes son las investigaciones iniciadas en 1991 por la Academia de Ciencias de Cuba y que se intensificaron a partir de noviembre de 2004, tras los impactos destructivos de los huracanes Charley e Iván en el occidente del país, señaló.

Desde entonces, agregó, comenzaron los estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgo territoriales para la reducción de desastres, en tanto en 2007 empezó la conformación del Macroproyecto sobre peligros y vulnerabilidad costeros para los años 2050-2100.

Bajo la dirección del CITMA, participaron representantes de 16 instituciones de cinco organismos de la Administración Central del Estado, en febrero de 2011 lo aprobó el Consejo de Ministros y más tarde se dio paso a su actualización, de acuerdo con sus estadísticas.

Detalló el hecho de que la Tarea Vida tiene un alcance y jerarquía superiores a los anteriormente elaborados, su implementación requerirá de un programa de inversiones progresivas a corto (año 2020), mediano (2030), largo (2050) y muy largo (2100) plazos.

Precisó que se han identificado áreas priorizadas, teniendo en cuenta la preservación de la vida de las personas en los lugares más vulnerables, su seguridad alimentaria y el desarrollo del turismo.

La Tarea Vida, explicó, incluye acciones dirigidas a contrarrestar las afectaciones en las zonas vulnerables, entre ellas no permitir construcciones de nuevas viviendas en los asentamientos costeros y reducir las áreas de cultivo próximas a las costas o dañadas por la intrusión marina a los acuíferos subterráneos.

Contiene 11 tareas y la primera está relacionada con la necesidad de identificar y acometer acciones y proyectos de adaptación de carácter integral a fin de disminuir la vulnerabilidad en 15 zonas prioritarias.

En la lista figuran, sin ser inamovibles, el sur de las provincias de Artemisa y Mayabeque; el litoral norte de La Habana y su bahía; la Zona Especial de Desarrollo de Mariel; Varadero y sus corredores turísticos.

Además, los cayos de Villa Clara y del norte de Ciego de Ávila y Camagüey; el litoral norte de Holguín; la ciudad de Santiago de Cuba y su bahía; así como también los territorios amenazados por la elevación del nivel medio del mar en Cienfuegos, Manzanillo, Moa, Niquero y Baracoa.

El cambio climático es atribuido a la actividad humana, que altera la composición de la atmósfera y que se suma a su variabilidad natural durante períodos de por lo menos 30 años, por lo cual sus estrategias principales de enfrentamiento son la mitigación y la adaptación.

En consecuencia, el clima de la Isla es cada vez más cálido y extremo, como lo demuestra el hecho de que  desde 2001 hasta la fecha la azotaron nueve huracanes intensos, algo sin precedentes en la historia, según expertos en la materia.

Su régimen de lluvias se ha modificado e incrementado desde 1960 la frecuencia y extensión de las sequías, mientras se estima que el nivel del mar ha subido de forma acelerada en los últimos cinco años.

Las inundaciones costeras ocasionadas por la sobreelevación del mar y el oleaje, producidos por huracanes, frentes fríos y otros eventos meteorológicos extremos, representan el mayor peligro por los daños  que ocasionan sobre el patrimonio natural y el construido.

Pérez Montoya anunció la terminación de la primera etapa del Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático en la nación, que incluyó visitas de mayo a junio a todas las provincias y al Municipio Especial de la Isla de la Juventud, con  el propósito de educar a la población y fomentar la percepción del riesgo.

Reina Mercedes Rodríguez, diputada por Villa Clara, propuso una felicitación a los organismos e instituciones implicados en elaboración de la Tarea Vida, sobre todo su aplicación a pesar del bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos, considerado el genocidio más largo de la historia.

Su colega Andrés Castro Alegría opinó que es estratégica la implementación y sugirió su respaldo y aprobación, lo cual se llevó a cabo por unanimidad.

Escribir un comentario


Código de seguridad
Refescar

feed-image RSS