Obra Estáticos. Foto: Heidi Calderón.
La noche del jueves 18 de septiembre fue, sin duda, inolvidable para Yoel González Rodríguez, uno de los más jóvenes y prolíficos integrantes del movimiento danzario profesional de Guantánamo
Desde el escenario del teatro Comandante Eddy Suñol, de la Ciudad de los Parques, donde desde hacía varios días sesionaba el Primer Concurso Internacional de Danza Atlántico Norte, dedicado a jóvenes bailarines y coreógrafos de la comunidad latinoamericana y caribeña, González conocía la noticia de que su obra Estáticos resultaba merecedora del Premio Único de Coreografía del certamen, luego de la evaluación que hiciera el jurado integrado por el afamado bailarín ucraniano Vladimir Malakhov, Paul Seaquist, empresario del mundo danzario, y Maricel Godoy, directora de la compañía Codanza.
El premio de coreografía Codanza consistió en certificado, estatuilla y trabajarán durante todo un año en el montaje de una obra con la compañía anfitriona, que será presentada el próximo año. También la coreografía Cordero, de Aurelio Planes interpretada por Álvaro Yoel González, de Danza Fragmentada, mereció uno de los cuatro reconocimientos especiales otorgados por el jurado.
La obra premiada, estrenada precisamente para la ocasión, es un montaje en que el novel artista de la tierra del Guaso -ya galardonado en eventos y festivales dentro y fuera de su provincia- había estado trabajando desde hacía cinco meses con el apoyo de la Asociación Hermanos Saíz y la compañía Danza Fragmentada.
En Estáticos, sin necesidad de acudir a grandes artilugios tecnológicos, la exquisita interpretación, -que cuenta con la participación coprotagónica del bailarín Aurelio Planes, de Danza Fragmentada-, discursa sobre la violencia, el amor, las relaciones personales y las decisiones de la vida. La partitura coreográfica, evidencia el apego del autor a las tendencias más contemporáneas.
Acerca del simbolismo de la coreografía, Yoel comentó a una periodista local: "Esa es la vida de mi hermano y mía. La obra casi resume toda nuestra juventud, porque éramos un poco agresivos. A mi hermano no le interesaba mucho la danza, hasta que fue despertando y se incorporó a bailar".
Yoel González, quien ahora dirige su proyecto independiente Médula, es un declarado deudor de Alfredo Velázquez Carcassés, quien fuera uno de sus maestros durante sus años de formación en la agrupación guantanamera Danza Libre que el último dirigía.
En el evento tomaron parte 55 concursantes, representantes de 10 compañías de La Habana, Guantánamo, Camagüey, Villa Clara, Santiago de Cuba, Holguín y Matanzas, así como bailarines del Ballet de la Televisión Cubana, recién graduados de la Escuela Nacional de Ballet, estudiantes del ISA y otros bailarines independientes.