Sesenta años, se escribe y lee fácil, pero cuando se trata de tiempo de vida y labor, y si a eso le sumamos acumular tantos resultados como los del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Índer), entonces ya adquiere mayor connotación mencionar tal número.

El pasado 23 de febrero el Índer celebró sus seis décadas de existencia como institución cubana encargada de promover la masificación deportiva en el país, no solo dirigida a lograr un espiral de atletas que lleguen al alto rendimiento, sino también de impulsar una mejor calidad de vida mediante la práctica de ejercicios físicos y la realización de actividades recreativas sanas.

Eran muchas las motivaciones y por ello no faltó la fiesta, aunque la actual situación epidemiológica impuso un jolgorio distinto y movió la acostumbrada alegría que desbordan en barrios y comunidades los trabajadores del sector, a viviendas, portales, balcones y las redes sociales de internet.

“Celebramos respetando el aislamiento y el distanciamiento físico en los hogares de nuestros trabajadores, atletas, estudiantes y practicantes sistemáticos. Entre las actividades que durante dos semanas hemos venido desarrollando desde las casas sobresalen los juegos participativos y de mesa, la confección de figuras de origamis con papel, los maratones en familia y las muestras de tai chi por adultos mayores. Todo eso con la invitación a compartir en las diferentes redes sociales imágenes y videos de lo hecho”, explicó Richard Cruz Salcedo, subdirector provincial de Deportes en Guantánamo, y agregó:

“Un proyecto muy interesante que estamos realizando a propuesta de Juan Sabourin Céspedes, presidente de la Comisión de Atención a Atletas, es el de ponerleCruz Salcedo: Nos aprobaron la entrega de 30 sellos conmemorativos por este aniversario del Índer, ceremonia que realizaremos cuando la situación sanitaria lo permita. a los 45 combinados deportivos del territorio el nombre de glorias, competidores con resultados y personalidades que nos han acompañado en estos 60 años.

“Tampoco se puede dejar de mencionar el trabajo que realiza nuestro personal actualmente tanto en el enfrentamiento a la pandemia, que incluye desde el apoyo al hospital de campaña en la Escuela de Integración Deportiva (EIDE), con los especialistas del Centro Provincial de Medicina Deportiva como faro, al servicio de mensajería, la contribución al sistema de atención a la familia y la pesquisa en los barrios; como en la producción de alimentos y la lucha contra coleros, acaparadores y revendedores”.

¿Qué logros resaltan en el trabajo del Instituto hasta hoy?

“No es poco lo logrado. Sobresale la creación de una infraestructura que sembró instalaciones deportivas por todo el país, tanto en zonas rurales como montañosas, y donde solo en Guantánamo atendemos -- propias y -- de otros organismos como Educación; y la superación de una fuerza técnica que permite que en nuestra provincia tengamos 5 mil 614 trabajadores que se diseminan entre 45 combinados deportivos que cumbre toda nuestra geografía, la EIDE, la Escuela de Profesores de Educación Física (con 652 y340 estudiantes, respectivamente), las academias de Boxeo y de Béisbol, el Centro Técnico de Ciclismo y otras dependencias.

“Lo anterior es lo que ha permitido que formáramos atletas que han llenado de gloria a Cuba y nos colocan entre los tres territorios del país que más han aportado en competencias multideportivas (más de 300 medallas entre Juegos Panamericanos y Centroamericanos y 28 en olimpiadas), pese a ser una provincia pequeña y predominantemente montañosa. Hoy contamos con alrededor de 60 guantanameros en las escuelas nacionales de diferentes especialidades, base para los resultados que seguirán llegando.

“Destaca, además, el accionar en el fomento de la recreación sana, algo que es reconocido al terminar cada verano, etapa del año en que todo nuestro personal se vuelca a los barrios, en muchas ocasiones con iniciativas e implementos propios, y donde somos uno de los organismos sobresalientes”.

¿Los problemas y retos tampoco faltan?

“Indudablemente tenemos dificultades por superar. Hoy es vital mejorar las condiciones de las instalaciones deportivas y la atención a nuestros atletas, glorias, estudiantes, trabajadores y sus familiares, perfeccionar la captación de talentos y el apoyo a las disciplinas con mejores resultados (en ese camino, por ejemplo, se esperan crear las academias de baloncesto y fútbol), y seguimos en deuda con el pueblo de lograr un título en el béisbol, principal pasatiempo nacional.

“Es mucho lo que nos queda por hacer. Estos 60 años nos llenan del compromiso de ir por más”, concluye Cruz Salcedo.

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