Para un profesional de la fotografía de prensa es difícil visitar Baracoa e irse de este encantador municipio sin antes haber tomado algunas fotos, siempre con la intención de compartirlas con los amigos o lectores del medio para el cual trabaja.
Recientemente en un atípico periplo de trabajo por la ciudad primada de Cuba, la pertinaz y característica lluvia nos dio a intervalos la posibilidad de un pequeño vistazo a sus calles e instalaciones para tomar algunas fotos, que en parte satisfacen nuestra intención.
A pesar de ser una ciudad que próximamente cumplirá 504 años de su fundación como primera villa cubana, mantiene y en gran parte renueva sus valores patrimoniales siempre con la vista puesta en conservar el estilo colonial que la caracteriza.
Por ello, es fácil después de rebasar el maravilloso viaducto La Farola ver construcciones techadas con tejas francesas, balcones volados y numerosos elementos de una arquitectura que logra combinar de manera armónica lo nuevo con lo antiguo.
Esta es sólo una muestra de cuanto puede encontrarse en la ciudad de Baracoa.
Busto del indio Hatuey, quien por años anduvo por los diferentes parajes baracoenses.
Hotel Plaza, uno de los más antiguos de Baracoa, totalmente remozado.
En muchas instituciones se han recuperado los balcones bolados, característicos de construcciones coloniales.
Algunas instalaciones de la época conservan sus valores gracias a las constantes labores restauración.
A la izquierda el Hostal Río Miel, instalación turística recién construida frente al Hotel La Rusa.
En las nuevas construcciones al estilo colonial se emplean para techos las tejas francesas.
Los encantos de Baracoa atraen cada año a muchos turistas.
Este restaurante particular perpetúa la fecha de fundación de la primera villa cubana
La estatua del pelú de Baracoa ahora trata de proteger a los pobladores de su propia maldición.
En establecimientos vecinos se combinan armónicamente lámparas, verjas, columnas, arquitrabes y otros elementos de la arquitectura colonial.
La iglesia Nuestra Señora de la Asunción de Baracoa, institución totalmente remozada que atesora La Cruz de La Parra, única de su tito existentes de las plantadas en toda la isla por Cristóbal Colón.
Balcones y techos que conservan las tejas y otros elementos con que fueron construidos
Maravilla de la arquitectura cubana, el viaducto La Farola atraviesa el macizo montañoso para facilitar el acceso a Baracoa.