Imprimir

1 corea del norte prueba misil balistico intercontinental“Más vale que Corea del Norte no lance otra amenaza a Estados Unidos… Enfrentarán fuego e ira como el mundo nunca ha visto”, declaró Trump desde su club de golf en Bedminster, Nueva Jersey, donde pasa unos días de vacaciones.

Corea del Norte amenazó con atacar las bases militares de Estados Unidos en la isla de Guam. Lo hizo horas después de que Donald Trump elevara el tono de sus advertencias a Pyongyang y que el Pentágono enviara de nuevo bombarderos B-1B a la península coreana.

La respuesta de Corea del Norte a las advertencias del presidente de Estados Unidos llegó por boca de un portavoz del Ejército Popular coreano. El militar consignó que están “analizando cuidadosamente un plan operativo para un fuego envolvente en torno a Guam con misiles de alcance medio largo Hwasong-12 para contener las principales bases estratégicas de Estados Unidos en la isla, incluida la Base Aérea de Andersen”.

Un vocero del Ejército Popular Coreano, en un comunicado difundido por la agencia estatal de noticias norcoreana KCNA, dijo que el plan de ataque será puesto en práctica en cualquier momento, una vez que el líder Kim Jong-un tome una decisión.

En la Base aérea de Andersen están apostados los bombarderos estratégicos B-1B con capacidad nuclear, que ayer volvieron a ser enviados por Estados Unidos a la península coreana. “En la mañana del 8 de agosto los piratas aéreos de Guam volvieron a aparecer en el cielo por encima del sur de Corea para realizar una alocada maniobra que simula una guerra real”, añadió el comunicado del portavoz militar norcoreano.

En otro comunicado, que cita a otro portavoz militar, Corea del Norte indicó que podría llevar a cabo una operación preventiva si Estados Unidos da señales de provocación.

La advertencia ocurre después de que Estados Unidos envió de nuevo bombarderos estratégicos a Corea del Norte para realizar un ejercicio de lanzamiento de una bomba nuclear, informó la Agencia de Noticias Central Coreana.

A instancias de Washington, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) impuso nuevas medidas contra Pyongyang, que podrían costar a Norcorea mil millones de dólares anuales y afectarían su comercio con China, su principal aliado y socio económico.