Estudios de la encuestadora Hinterlaces revelan hoy una recuperación de los niveles de aprobación y apoyo a la gestión del presidente venezolano Nicolás Maduro y un fortalecimiento del chavismo como identidad y posición política.
Asimismo, suben los niveles de optimismo y esperanza, y bajan los de preocupación y molestia con respecto a enero pasado, informó el periodista José Vicente Rangel en su habitual programa televisivo de los domingos.
Sin embargo, aún existen algunas incertidumbre con respecto al rumbo económico del país y los índices de desabastecimiento, el problema que más preocupa a la mayoría de los venezolanos, según Hinterlaces.
El mayor crecimiento y recuperación del respaldo gubernamental se observa en las bases sociales, las cuales históricamente han brindado apoyo a la Revolución bolivariana, arrojan las pesquisas.
Aunque son diversos los factores que explican este ascenso, destaca la campaña en rechazo a la orden ejecutiva del presidente estadounidense Barack Obama contra esta nación, indicó Rangel.
Este proceso brindó nuevas banderas, metas y argumentos: cohesionó y movilizó a un importante número de personas en defensa de la soberanía, la independencia nacional y el legado del fallecido mandatario Hugo Chávez, iniciador del proceso socialista en Venezuela, añadió.
La denominada corriente chavista, que apoya a la Revolución y su proyecto, recupera las expectativas positivas y las esperanzas, perciben un gobierno cohesionado y activo, así como un Presidente trabajando para resolver los problemas, aseguró.
Ahora hay más argumentos para enfrentar el discurso del pesimismo y el fatalismo, puntualizó.
El chavismo es la única fuerza social, cultura y simbólica con carácter popular y es la única vanguardia política frente a una oposición dividida, sin mensaje ni oferta, elitista y sin presencia en movimientos sociales o en las calles, señaló.
Con esta coyuntura, una adecuada gestión económica de Maduro para enfrentar el desabastecimiento y la inflación podría ampliar la base social de apoyo entre las clases medias y populares de cara a alcanzar la mayoría electoral en las próximas elecciones parlamentarias.
A juicio de Rangel, esta sería una buena oportunidad para retomar las propuestas económicas aprobadas en el Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela y ejecutar los acuerdos dirigidos a reactivar la producción.