Imprimir

recuperacion cafeCon pasos seguros parecen andar los guantanameros en la siembra de cafeto. Al menos así lo sugieren las más de cinco mil hectáreas plantadas en los últimos 30 meses y la calidad con que ejecutan esa importante tarea económica.

Desde el 2012 hasta junio último este territorio sembró exactamente 5 473 hectáreas, en su inmensa mayoría por renovación de los viejos e improductivos cafetales. En el 2013, por ejemplo, en Guantánamo se sembraron 2 536 hectáreas y de ellas solo 18 fueron en campos nuevos.

El programa de recuperación cafetalera en la provincia prevé sembrar 12 646 hectáreas del 2012 al 2020, lo que de lograrse equivaldría a dejar renovadas alrededor del 70 % del área existente, con lo que ello pudiera significar en el in­cremento de los rendimientos y las cosechas en unos pocos años.

Por lo pronto lo sembrado representa el 43,2 % de lo planeado en el mencionado programa. Armando Fong Berguelich, jefe del departamento productivo en el Centro de Gestión de Agricultura de Montaña, afirma que la intensión es sembrar la última hectárea antes del 2018.

Comenta este especialista que la siembra se ha asumido con responsabilidad por los ocho municipios cafetaleros de la provincia, si bien Maisí, Yateras y El Salvador ejecutan los mayores programas.

“Yo creo que los productores, definitivamente, se van convenciendo de que para que el café produzca primero hay que renovar las viejas plantaciones, algunas de ellas con más de medio siglo de existencia”, reflexiona Armando.

Opina que los resultados alcanzados hasta ahora en la siembra también se deben al incentivo que constituye el mayor precio con que se paga el grano al productor y al hecho de haberse retomado la obtención de posturas en viveros. En estos momentos, precisa, la provincia dispone de algo más de 3 millones de posturas aptas en viveros, de las que más de un millón corresponden a Yateras.La estrategia seguida ha sido aprovechar los meses de primavera para realizar alrededor del 80 % de las plantaciones, y dejar el otro  20 % y la resiembra para la campaña de frío, en que las lluvias son más escasas y se compite con el desarrollo de la cosecha, reseña el experto y agrega que la renovación de los viejos cafetales lleva implícito el sellamiento de las áreas y la mejora de las variedades, siendo las que más se usan el Caturra rojo y amarillo, Isla, Borbón y Robusta.

Hasta el momento —testifica el directivo—  las siembras se realizan con calidad, tal y como lo demuestra el 86 % de su­pervivencia  alcanzado en el 2012 y el 91 % un año después. Ello a pesar de que municipios como Niceto Pérez, San Antonio del Sur, Imías y parte de Maisí han afrontado sequías severas.

Fong Berguelich informa que entre el 10 y 19 de julio último especialistas de la Estación Experimental Agroforestal de Tercer Frente, en el municipio de Santiago de Cuba, inspeccionaron la agrotecnia cafetalera en Guantánamo y evaluaron de Bien la siembra y actividades afines como la calidad de las posturas, la supervivencia y el estaquillado y hoyado de los campos.

DOS USUFRUCTUARIOS QUE ENALTECEN LA TAREA

Los usufructuarios Ramón González Rodríguez y Roberto Martínez Calunga, con sus resultados, simbolizan el esfuerzo que realiza la provincia en la siembra de cafeto. Ambos pertenecen a la Cooperativa de Crédito y Servicios Fortalecida Roberto Rivero Elías, de Palenque, en el montañoso municipio de Yateras, y fueron favorecidos desde hace un lustro con la entrega de tierra en usufructo mediante el entonces vigente Decreto-Ley 259.

“Cuando recibí esta finca en el año 2009 (señala formando un círculo con el dedo índice de su mano derecha), en ella no quedaba café en buen estado. Por eso, mejor que perder tiempo salvando a las viejas y deterioradas plantaciones, me dediqué a hacer un microvivero con 16 000 posturas para renovar las 3,15 hectáreas  que poseo. Hoy solo me resta por sembrar un cayito, que espero concretar en unas horas”, relata Ramón, locuaz yaterano que no oculta lo feliz que se siente con su finca, la que ha logrado ordenar y cercar completamente con cardona.

“Recuerdo que en la primera cosecha apenas recogí 40 latas. Ya en la pasada acopié unas 400 y en esta que nos cae encima espero alcanzar 500, pues entran en producción nuevas matas, fruto de la renovación”, refiere con lenguaje campechano.

Roberto, por su parte, desde hace tres años renovó sus 4,77 hectáreas, aunque como Ramón, mantiene la producción de posturas para corregir las posibles fallas de sus campos o venderlas a otros productores que no cuentan con microvivero.

En la zafra anterior (2013-2014) este labriego recolectó 956 latas, tres veces y un poco más de las que cosechó cuando le entregaron la finca. “Ese es el resultado de la renovación: más y mejor café”, sentencia quien también es reconocido por la aplicación en sus predios de medidas de conservación y mejoramiento de suelo, como la construcción de tranques con troncos de árboles, de  barreras vivas y muertas y el empleo de materia orgánica, acción esta última que hace patente en cada hoyo destinado a la siembra de café.

Fuente:Granma

recuperacion cafe2