Disminuir la mortalidad infantil y materna, garantizar la estabilidad de la situación epidemiológica, elevar la calidad de los servicios y fortalecer la política de cuadros resaltan dentro de los retos del sector de la Salud en Guantánamo en 2020.
Según Humberto Velázquez Romero, responsable del Programa Materno Infantil en la provincia, es necesario lograr mayor control del riesgo preconcepcional, ya que el 80 por ciento de las gestantes llegan enfermas al embarazo debido, entre otras causas, al elevado número de interrupciones.
Sobre la situación epidemiológica y las arbovirosis, Eduardo Sánchez Lara, director de Higiene y Epidemiología en el territorio precisa que es vital desarrollar métodos de trabajo más integrales, sistemáticos y participativos, así como mejorar la dispensarización, para lograr la sostenibilidad.
Dichos propósitos fueron expresados durante la asamblea de balance que evaluó la labor desarrollada el año pasado por Salud, y donde Rafael Pérez Fernández, miembro del Comité Central del Partido y su primer secretario en la provincia, subrayó la importancia de la prevención como estrategia fundamental de la salud en Cuba con énfasis en el diagnóstico y la dispensarización.
En la reunión destacaron los resultados del sector, entre los que sobresalen la disminución de la mortalidad materna, por debajo de la media nacional, y el cumplimiento del programa quirúrgico, a pesar de las restricciones resultantes del injusto bloqueo impuesto por Estados Unidos, que el pasado año incluyó más de 50 medidas destinadas a asfixiar la economía cubana.
A la lista de logros se suman también las donaciones voluntarias de sangre, que sumaron 16 mil 33, así como la exportación de servicios de salud.
Durante el intercambio se analizó, además, el estado de salud de la población y su satisfacción con los servicios, sobre la base de cuánto falta por hacer y a partir de ello proyectar las acciones para que el presente año avance la solución de los problemas que afectan a la provincia.
