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locomotoraLa vieja locomotora ejerce una fuerte atracción visual de todos los que transitan por Los maceo y Bernabé Varona, donde el Proyecto Orígenes crea un parque temático como para de las acciones que reviven las raíces fundacionales de Guantánamo. Foto: Lorenzo Crespo Silveira

Corría el año 1856 cuando en la villa de Santa Catalina del Saltadero se escuchó por vez primera el estrepitoso sonido de la locomotora. El nuevo camino de hierro que se tendía por terrenos empolvados inauguraba, de esta manera, una nueva época para la ciudad de Guantánamo.

Por aquellos tiempos gobernaba el teniente Enrique Sánchez Manjón, y fue quien realizó, el 24 de julio de 1854, la primera junta preparatoria para la construcción de esta vía férrea, debido a la creciente necesidad de trasladar mercancías como azúcar y café, comercio en auge por aquellos momentos.

Se crea una sociedad anónima encargada de financiar la infraestructura ferroviaria, y el ingeniero francés Julio Sagebien devino el garante encargado del trazado de la vía; mientras que, los terrenos por los que se iba a tender el “gigante de hierro” fueron donados por Agustín Pérez y Pedro Manuel Pérez.

Fue así como, en diciembre de 1856, después de 16 meses de incesante faena, quedaba inaugurado el primer tramo del ferrocarril, entre la entonces Santa Catalina del Saltadero y Cerro Guayabo, en Caimanera; camino que a la postre favoreció el desarrollo comercial de la ciudad de Guantánamo.

Vestigio de aquella época es la vieja estación de ferrocarril ubicada en la misma esquina de Los Maceo y Pintó, instalación que revive el Proyecto Origen, dirigido a rescatar los valores patrimoniales de la ciudad, para mejorar su imagen urbana, y preservar en las actuales generaciones la historia de la comarca.

En la vieja terminal se crea el Parque temático del primer ferrocarril de Guantánamo, que ya exhibe una locomotora de la época, traída desde el poblado de Costa Rica.

El Proyecto Origen propone que esta edificación acoja la Dirección Provincial de Ferrocarriles, donde existirá una sala de historia y se restablecerá la Terminal de Caimanera, retomando así su antigua función de unir a la población de Guantánamo con la de aquel sureño municipio.

La vieja estación de Ferrocarril renacerá nuevamente para acoger, como hace aproximadamente 159 años, al pueblo guantanamero y para recibir, vestida de gala, el 145 aniversario de la villa de Guantánamo.