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1aaModibar EstilosExterior de lo que fuera el Modibar Estilos.Se inauguró con bombo y platillo. Luces, pasarela, música. En aquel momento, un alto funcionario mencionó que aquellos equipos, sobre todo las primeras, eran de lo mejor en el mercado, quizás cierto, quizás solo un cliché. Pero se veía bien. Se sentía bien. El Modibar Estilos era un hecho consumado, y lucía hermoso.

Había costado varios miles de pesos, buena parte de ellos en moneda convertible, y fue desde su apertura en 2009 la sede de la compañía de modas Ikari Van, llamada a ser la vitrina del buen vestir y el diseño en la más oriental.

Cuando dejó de ser noticia su apertura, todavía se llenaba en las noches. En esos días, Raúl Castillo, uno de los diseñadores de moda más famosos de Cuba, apoyó con sus creaciones y sapiencia la pasarela local.

1aaMOdibar estilos hasta hace pocoHasta el mes de marzo de 2016, aunque desde hace rato tenía otro uso, todavía se mantuvo afuera de la instalación el cartel que identificaba al Modibar Estilos.Fue, si soy sincera, lo último que escuché del Modibar. En algún momento, asegura Wiliam Ferrer Fernández, gerente adjunto de la Sucursal Cimex, a la que pertenece, las pérdidas fueron mayores que las ganancias y, unos cuatro años después, decidieron cerrarlo.

A la luz de los años, me pregunto si no hubo manera de salvarlo como espacio cultural, diversificándolo, poniéndole creatividad, ganas a ese empeño que en su momento fue motivo de orgullo.

Pero el caso es que cerró. Una tienda de electrodomésticos se instaló en el espacio que ocupaba la pasarela. Ollas arroceras, televisores LCD, batidoras..., donde antes se hizo sitio al glamour y la belleza, y donde quedan, eso sí, pendidos del techo todavía, los costosos sistemas de luces inteligentes.

En el ala norte, la barra se quedó donde estaba y funciona como un bar, con algunos juegos que parecen ser del gusto popular o por lo menos del gusto de quienes pueden pagarse las partidas –de billar por ejemplo.

Las luces, explica el gerente, ya no valen lo mismo que en sus primeros tiempos y de acuerdo con la legislación vigente, no pueden ser vendidas ni transferidas a otra entidad fuera de Cimex, -digamos, por ejemplo Cultura, cuyas instituciones harían fiesta si les tocaran en suerte-, al menos por decisiones locales.

Solo si lo autorizan desde arriba, me dice, y deja el asunto cerrado: ciertamente no me imagino una rueda de ministros deliberando qué hacer con un juego de luces y un seguidor con valores depreciados ubicados en un comercio guantanamero, en el otro extremo del país.

Podríamos echarle la culpa a la legislación vigente, una legislación que puede haber sido promulgada por razones nobles y entendibles, pero que suena absurda cuando en un país bloqueado, con miles de carencias, un papel asegura que está bien que unos equipos especializados se pierdan solo porque la entidad que los compró ya no los usa.

Podríamos, pero es la legislación vigente, y esa no se cambiará por ahora. Incumplirla tampoco es una opción. Entonces queda el hombre, las gestiones de ese hombre aunque viva en Guantánamo y las decisiones dependan de otros como él a más de 900 kilómetros de distancia.

La salida, me asegura Ferrer, pudiera estar más cerca de lo que pensamos. "Porque nunca renunciamos a recuperar un espacio como el Modibar, aunque no sea en el mismo sitio. Y ya estamos haciendo gestiones", me adelanta.

Pero son planes, buenos, pero planes al fin, porque en la concreta las luces siguen ahí, pendidas, no guardadas ni conservadas, sino expuestas a los elementos, como alimento para los detractores, para el que goza diciendo "mira cómo pierden eso, mira qué desperdicio" -así mismo sigue la pantalla de fondo y las bocinas del  audio.

Y lo peor es que la situación no es única. Lo subutilizado aquí, y que necesitan otros, deviene inversión del Estado que no aprovecha nadie y pudiera correrse el riesgo de que siguiera rumbo particular y convertirse, de abandono en delito.

1bmodibar EstilosEl Modibar Estilos fue desde su apertura en 2009 la sede de la compañía de modas Ikari Van.1cModibar EstilosEl Modibar se pensó como vitrina del buen vestir y el diseño en Guantánamo.1dModibar EstilosEn algún momento, según Cimex, las pérdidas fueron mayores que las ganancias y, unos cuatro años después, decidieron cerrarlo.

1aModibar EstilosEn vez de salvarlo como espacio cultural, su lugar lo tomó una tienda de electrodomésticos en el área de la pasarela y la barra se quedó donde estaba y funciona como un bar. Así luce hoy el Modibar Estilos.