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La sangría con frutas es un clásico del buen tiempo muy fácil de hacer en casa con zumos naturales y vino, sin necesidad de usar refrescos súper azucarados. Podemos graduar a nuestro gusto la cantidad de azúcar.

La sangría consiste en mezclar un vino de mediana calidad, ni muy bueno ni muy malo, con algo de zumo de limón o naranja o ambos (que ha ido siendo sustituido en las últimas décadas por refresco de limón o naranja, o gaseosa), algo de azúcar y un buen montón de frutas en trozos a modo de tropezones.

Esta sangría con frutas dentro de un dispensador de cristal lucirá muchísimo y dejaremos boquiabierto a nuestro público. Eso sí, al servirla con el grifito tendremos que pescar los tropezones, pero si la servimos en unas coquetas jarras de cristal con tapa nuestros invitados nos perdonarán.

sangria con frutas

Sangría con frutas

Ingredientes (para 8-10 personas):

1,25 litros de vino tinto de mediana calidad

500 ml de zumo de naranja, exprimido al momento

El zumo de un limón

150 g de azúcar

Limón y naranja adicional en rodajas de adorno

Frutas variadas en trozos

Dos palos de canela

Hielo al gusto

Elaboración:

Con un exprimidor exprimimos las naranjas y el limón, hasta obtener la cantidad de zumo indicado.

En el dispensador o jarra que vayamos a utilizar, vertemos los zumos, el azúcar y el vino.

Con una cuchara de madera o un utensilio que llegue al fondo, removemos bien hasta que se aprecie que no queda azúcar sin disolver.

Cortamos unas rodajas de naranja y de limón como adorno.

Cortamos fruta en trocitos a nuestro gusto y añadimos todo a la sangría.

Agregamos los palos de canela y dejamos reposar el conjunto una hora al menos, para que las frutas se empapen y la sangría tome el sabor de la canela.

Añadimos el hielo al gusto, dejamos unos minutos para que se enfríe el conjunto, cerramos la tapa del dispensador. Podemos servir en jarras de cristal.