Oscar Leyva Pompa, director de la Empresa de Suministro y Transporte Agropecuario, subrayó que esa entidad sobrecumplió el plan de ingresos que significó más recursos llevados a las cooperativas para producir alimentos. Fotos: Leonel Escalona Furones y del autor
“Si nosotros les pedimos a los campesinos dar más y el país dispone de ciertos abastecimientos, estos hay que garantizárselos, sin dilación, aunque sea transportándolos mediante carretas con bueyes”, subrayó José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido, durante el proceso asambleario de la Asociación de Agricultores Pequeños (ANAP) desarrollado en Guantánamo en el año 2015.
En esa oportunidad, el también vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros exhortó al Ministerio de la Agricultura a cumplir con la entrega de recursos a la base productiva, en tanto el entonces miembro del Buró Político y vicepresidente del Consejo de Ministros, Marino Murillo Jorge, precisó que en ocasiones materia prima y piezas permanecen en los almacenes, cuando debían estar a pie de surco, en función de las tareas agrícolas.
Ante la orientación de ambos dirigentes, la respuesta guantanamera no se hizo esperar, sobre todo, porque se trata de incrementar la producción de alimentos para disminuir importaciones y satisfacer la demanda de la población.
Oscar Leyva Pompa, director de la Empresa de Suministro y Transporte Agropecuario en la más oriental provincia cubana, subrayó que la tarea tomó impulso con el nuevo modelo de gestión económica, cuya finalidad es acercar los recursos a las diferentes formas productivas (CCS, CPA, UBPC, Granjas estatales), basado en relaciones contractuales.
“Después de que las cooperativas realizan su demanda y se plasma en contrato es una obligación de nuestra entidad garantizar el suministro y transportación de los insumos, entre ellos, de 52 renglones que no pueden faltar, para que sean más eficientes y productivas.
Mencionó, entre ellos, ropa y calzado de trabajo, botas PVC o de goma, limas, machetes, herraduras, clavos de herrar, soga, fertilizante, productos químicos, arados mecanizados y de tracción animal, baterías, neumáticos, envases (sacos y cajas) y otros.
“Esas estructuras productivas también pueden adquirir en nuestra red mangueras, regaderas de agua, puntillas para la construcción, diferentes tipos de cemento y otras mercancías, a precios de venta mayorista”, puntualizó.
Leyva Pompa explicó que el pasado año se garantizó el 92 por ciento de lo demandado por las cooperativas, ya que faltó soga de calidad, en lugar de la cual se comercializó la artesanal, tijeras de podar y serruchos para los caficultores, así como cántaras de leche para los ganaderos.
“No obstante haberse contratado fuera de Cuba, la mayoría de los referidos renglones ya están presentes en todos los establecimientos comerciales”, aseguró.
Respecto a los productos químicos, añeja preocupación de los productores, apuntó que se repartieron dentro del paquete tecnológico a los productores cuyos cultivos lo tenían asignados, y se siguen entregando planificadamente de acuerdo con las etapas de las campañas de siembra.
“Las botas de goma, otra inquietud generalizada, se distribuyeron a todos los campesinos y cooperativistas de los municipios del este de la provincia, con prioridad para los de las zonas afectadas por el huracán Matthew. Falta por repartir en los próximos días a los de El Salvador, Niceto Pérez y Manuel Tames”, sentenció.
El directivo comentó que luego del fenómeno meteorológico, el Ministerio de la Agricultura activó la Operación Logística, con el objetivo de garantizar los recursos necesarios para acelerar la recuperación de los daños provocados al sector en los territorios devastados.
“Los recursos llegan a la provincia y la empresa, con su obsoleto parque de vehículos, los traslada a esas localidades. En menos de siete horas después de su arribo a la provincia, los hemos llevado hasta Baracoa y Maisí, los más lejanos”, ejemplificó.
“Después de Matthew hemos distribuido grandes cantidades de tejas de zinc, de fribrocemento, acero, puntillas, pintura, cemento, electrodos, machetes, limas, aceites y lubricantes para las más 100 motosierras que se emplearon en la recuperación de las áreas de coco, café y cacao, además de mangueras para sistemas de riego, regaderas de mano...
“Muchos de los materiales asignados se destinan a la recuperación de aserríos, almacenes, albergues, despulpadoras, oficinas de las cooperativas y otras instalaciones agrícolas, que fueron muy dañadas”.
Luego de haber sido devastado por Matthew, el centro comercial de Baracoa reúne las condiciones que dignifican el desempeño de la Empresa de Suministro y Transporte Agropecuario. Fotos: Leonel Escalona Furones y del autor
Mirada interior
“Para acercar los recursos a los productores, ampliamos las capacidades de almacenamiento en la empresa, que cuenta con ocho centros comerciales en igual cantidad de municipios y 14 subsedes, creadas desde el año pasado, en lugares tan apartados como La Tinta y Vertientes, en Maisí; Limonar y Sempré, en El Salvador; La Tagua, en Manuel Tames; Bernardo y La Clarita, en Yateras, por citar algunos.
Al mismo tiempo, se mejoran las condiciones de trabajo a través del proceso de dignificación que prevé el embellecimiento de todas las instalaciones.
“Por lo pronto, iniciamos por los centros comerciales de Baracoa, Maisí e Imías, devastados por Matthew, los cuales son ejemplo de lo que podemos hacer en los restantes”, destacó el director.
Tales acciones -al decir del directivo- contribuyeron a aumentar la calidad del servicio, elevar la eficiencia, consolidar el nuevo modelo de gestión, y, consecuentemente, multiplicar los resultados económicos de la empresa, cuyos ingresos en el 2016 ascendieron a 62 millones 703 mil 600 pesos, superiores en un 23 por ciento a los planificados.
“Ello -apuntó- permitió pagar a los trabajadores un salario medio de mil 336 pesos, con la aplicación de estimulantes sistemas de pago por resultados, previstos en la Resolución 6, así como incrementar y estabilizar el suministro de recursos para producir más alimentos”.
Testigos del cambio
La visita a varios municipios, entre ellos, cuatro de los afectados por el huracán, permitió a este reportero escuchar opiniones de productores y directivos a diferentes instancias, sobre los servicios que ofrece la Empresa de Suministro y Transporte Agropecuario:
Egueny Rodríguez Martínez, director técnico y de desarrollo de la Empresa Agropecuaria de San Antonio del Sur, afirmó que, a diferencia de campañas de siembra anteriores, dispusieron a tiempo de semillas de calidad certificada, suficiente fertilizante y productos químicos necesarios suministrados por la referida empresa.
En la Cooperativa de Producción Agropecuaria 17 de Mayo, en el Valle de Caujerí, su presidente, Misael Hernández Rodríguez, agradeció haber tenido a mano oportunamente productos químicos para controlar el Agente 549 y otras plagas que atacaron las plantaciones de tomate.
“Todos los trabajadores recibieron, en el momento necesario, los insumos y recursos para que el presente sea el año del tomate en este jardín natural, soñado por el Comandante en Jefe Fidel Castro”, apreció.
Satisfechos por contar en las cooperativas con los recursos suministrados por la referida empresa cuando más se requerían, se mostraron también Francisco Reyes Guilarte, vicepresidente de la Junta directiva de la CPA Domingo Hernández de El Corojo, así como Aracelio Calderín y Efraín Díaz Leyva, de la CCS Elis Rodríguez, entre otros campesinos.
Los productores y cooperativas adquieren muchos de los recursos e insumos para cultivar la tierra en los centros comerciales y subsedes de la referida entidad. Fotos: Leonel Escalona Furones y del autor
Ángela Rivera Gámez, económica de UBPC Álvaro Reinoso Valdés, de Los Llanos, en Maisí, transmitió la satisfacción de los trabajadores por la variedad y estabilidad en el abastecimiento de machetes, limas y demás herramientas para las actividades culturales del café el año pasado, algo que no ocurría hasta entonces.
“Facturamos la mercancía en el centro comercial y la pagamos en el término de los 30 días, luego la repartimos a los trabajadores, que tampoco se quejan por la ropa o las botas”, comentó.
En Baracoa, Abigaíl Dupotei Lambert, administrador de la UBPC Mártires de Angola, expresó que desde hace tres o cuatro años el cambio en la entrega de insumos y recursos, a través del sistema de Gelma, es notable.
“Nuestros 31 trabajadores cuentan ahora con machetes, azadas, limas, sacos, neumáticos para tractores, alambre, clavos…, en sus casas, para atender las 212 hectáreas que cubren las cinco fincas, dedicadas al coco y otros cultivos.
“Recientemente recibimos un arado, muy importante para la preparación de tierra, y suficiente fertilizante, esencial para el cultivo”, acotó.
“No nos quejamos por los recursos, los productores tienen en sus manos los principales para sacarle frutos a la tierra. Ahora se requiere trabajar más, y tener mayor sentido de pertenencia para corresponder, con resultados concretos, al esfuerzo que hace el país para garantizárselos”, apuntó finalmente.
