Las dermatofitosis, conocidas por la población como tiñas y equivocadamente como herpes, constituyen una infección superficial causada por hongos denominados dermatofitos, que afectan la piel del ser humano y de los animales, indica la doctora Marilyn Fleites Rumbaut, y aclara que el término tiña fue utilizado por los romanos para referirse a una larva de insecto (polilla de la ropa) que la consideraban la causa de la enfermedad.
Nuestra entrevistada, especialista de Primer Grado en Dermatología, se desempeña en el Hospital Pediátrico Docente Juan Manuel Márquez, de Marianao. Es Profesora Asistente e Investigadora Agregada, Máster en Genética Médica.
—Doctora, ¿es una o son muchas las especies de hongos que pueden originar la tiña?
—Los dermatofitos conforman 39 especies relacionadas en tres géneros. Solo unas pocas especies son causantes de las dermatofitosis, el resto habitan en los suelos y tienen escasa tendencia a infectar a los seres humanos.
—¿Es frecuente en nuestro medio? ¿Puede afectar a personas de cualquier edad y sexo?
—La morbilidad (frecuencia) mayor por afección dermatológica en Cuba son las enfermedades producidas por hongos. Se considera que un 60 % de la población padece de algunas de las enfermedades originadas por estos microorganismos debido a las condiciones climatológicas de nuestro país, cálido y húmedo, que las favorecen. Afecta a todas las edades y sexos. En general son más frecuentes a partir de la adolescencia, excepto la tiña del cuero cabelludo que se presenta en los niños.
—¿Se conoce el periodo de incubación y de transmisibilidad de estos agentes?
—El periodo de incubación es de una a tres semanas generalmente, aunque puede variar en dependencia del grado de infección y la respuesta del huésped, favorecido por la susceptibilidad del paciente, si existen otras dermatosis y los factores ambientales.
—¿Qué vías emplean para la transmisión?
—Están en dependencia de donde habite la especie causante. Los hongos que viven en el suelo infectan esporádicamente a los seres humanos. Hay especies que anidan en los animales domésticos (gatos, perros, conejos) y son transmitidas al hombre por el contacto directo con animales infectados, o de forma indirecta a través del pelo de los animales. Otras especies se transmiten de persona a persona por contacto directo o a través de prendas de vestir, peines, calzados.
—¿Esta dolencia tiene “predilección” por afectar determinadas partes del cuerpo?
—Sí, tiene predilección por el cuero cabelludo, la piel lampiña (cara, tórax, miembros), la barba, bigote, la región inguinal, la púbica, las palmas y las plantas. Se nombra según la zona afectada. Por ejemplo, la tiña de la piel lampiña se denomina tiña corporis; la tiña de la región inguinal y pubiana tiña cruris; y en las plantas tiña pedis o “pie de atleta”. En personas obesas se presentan a nivel de los pliegues.
—¿Una infección previa por tiña posibilita que la persona adquiera inmunidad?
—La tiña no deja inmunidad. Las personas pueden padecer la enfermedad cuantas veces se expongan al contacto con el hongo.
—¿Cuáles son sus síntomas y signos fundamentales?
— Se presentan lesiones enrojecidas con escamas en número de una o varias; en el cuerpo pueden ser redondas u ovaladas, con bordes sobreelevados y crecimiento centrífugo, adquieren forma de anillo y el centro se hace más claro. En el cuero cabelludo puede aparecer una o varias zonas sin pelo, redondeadas, con enrojecimiento y escamas. La tiña pedis se puede presentar por burbujas con líquido claro en su interior, que se rompen, dejando escamas secas en las plantas y también pueden afectarse los espacios interdigitales. Todas las formas de presentación se acompañan de “picazón” de variada intensidad.
—¿Cómo se establece el diagnóstico?
—Por las manifestaciones clínicas características observadas por el médico de asistencia y exámenes de laboratorio.
—¿Son eficaces los tratamientos?
—Sí. Se pueden indicar cremas antimicóticas aplicándolas sobre la piel afectada y alrededor de la lesión de dos o tres veces al día (en dependencia de la localización de cada paciente) por un periodo de cuatro a seis semanas. Solo se utilizan antimicóticos sistémicos por vía oral en los casos de tiña del cuero cabelludo y en uñas, asociado al tratamiento tópico o en casos más severos sin mejoría con el tratamiento tópico.
—En general, ¿cuál es el pronóstico de la enfermedad?
—Es favorable si se cumplen los pilares del tratamiento preventivo y terapéutico.
—¿Algún otro comentario?
—La tiña puede afectar la calidad de vida del paciente. Recomendamos asistir a su médico de familia si presenta algunos de los signos o síntomas de esta enfermedad para su curación inmediata y evitar el contagio de otras personas.