Imprimir
Visitas: 3439

baracoa periodistas experienciasFacilitado por el Ministerio de Comunicaciones (Mincom) por primera vez se utiliza en Guantánamo el sistema de transmisión satelital, que permite los enlaces en vivo con el Sistema Informativo de la Televisión Cubana. Fotos: Daniel Ross Diéguez

Cuando el viento y el mar amenazan con hacer estragos y el peligro es inminente, las torres de control meteorológico disparan sus indicadores y todos buscan estar a buen resguardo, entonces el ser humano busca –por instinto- la comunicación.

En ese momento anhelas ver más que nunca a los periodistas. Ahí interesan más los espacios informativos y no molestan las repeticiones del parte meteorológico porque nadie quiere perder ni un detalle de lo que está pasando. Corresponde entonces a los profesionales de los medios, sin importar los daños y el tiempo, hacer periodismo.

Desde Baracoa, Venceremos les cuenta la aventura informativa vivida durante el paso del huracán Matthew.

Fase informativa

El sistema de alerta temprana apenas anunciaba la posibilidad de que pasara por Baracoa el huracán Matthew y en la emisora CMDX La Voz del Toa cada cual asumió su función.

Algunos ya suman experiencias en periodismo de ciclones. Otros apenas se inician en el ejercicio de la profesión. Con ellos se movilizaron también realizadores de sonido, administrativos y personal de apoyo. Todos asumieron igual compromiso: mantener informada a la población bajo cualquier circunstancia.

Un equipo de trabajadores aseguró condiciones de contingencia para dar cobertura al fenómeno.

“Esta vez hubo tiempo para prepararnos. Desde el domingo 2 de octubre comenzamos a trasmitir en programación especial. A la vez que los trabajadores aseguraban sus casas, fue preciso garantizar la programación, de modo que nos organizamos por grupos de trabajo para cubrir todo el espacio informativo. A partir del lunes se activaron a tiempo completo los trabajadores imprescindibles para garantizar la salida al aire”, explicó Arelis Alba Cobas, Jefa de Información y Programación de la estación radial baracoense.

Mientras tanto en el telecentro Primada Visión, según afirmó Lisandra Savó Vega, su directora, “se trasmitieron los mensajes de alerta y las medidas necesarias para asegurar el paso del huracán. Desde diversos Consejos pPpulares, los reporteros reflejaron la preparación del municipio. Pases en vivo hacia la programación especial del telecentro Solvisión y el Sistema Informativo de la Televisión Cubana permitieron extender su alcance a Cuba y el mundo”.

“El proceso de evacuación, la venta de alimentos, orientaciones precisas para la protección de vidas humanas y bienes del Estado y contactos frecuentes con el Consejo de Defensa Municipal ocuparon la agenda informativa”, afirmó Mavel Toirac, periodista de la televisora municipal.  

“Esta vez hubo tiempo para prepararse”, reconocen los reporteros entrevistados. Los caprichos del huracán Matthew dejaron margen a asegurar todo lo necesario. Pero fue difícil prever su fuerza y la manera en que azotaría la primera Villa fundada en Cuba. En la medida que fue acercándose se hizo más peligroso el trabajo.

Llovían notas periodísticas. Televisión, radio, redes sociales, sitios oficiales en Internet, teléfonos: cualquier medio al alcance fue preciso para hacer periodismo, sin importar los daños y el tiempo.

arelis albaArelis Alba (@labaracoesa), relató esta experiencia como una de las más difíciles de su carrera como reportera. Fotos: Daniel Ross Diéguez

 Alarma ciclónica: mientras Matthew avanzaba en suelo cubano

“En la medida que el tiempo se fue deteriorando nos atrincheramos todos en el estudio. Pero los canales de comunicación poco a poco se cerraron. Nosotros buscábamos opciones, redactábamos y enviábamos información”, explicó Mavel Toirac.  

Cuando ya tocaba suelo cubano el huracán –relató el periodista Leandris Noa- recibieron un pase en vivo de la televisión nacional hacia la cabina de trasmisiones de Primada Visión, donde el equipo de trabajo se encontraba atrincherado.

“Justo cuando estoy explicando lo que sucede en Baracoa –cuenta- se interrumpe la comunicación. Comienza a desplomarse la cubierta y yo lo digo en vivo ¡se está cayendo el telecentro! En ese mismo momento se corta por segunda vez la llamada y ahí todo el mundo pensó que había pasado lo peor.”

Mensajes de televidentes en toda Cuba y amigos preocupados por lo que sucedía llegaron a borbotones.

“Esa fue una noche de gran ansiedad”, precisó Karel David Ruenes, de Primada Visión, en tanto para el camarógrafo Rolvis Yasser Machado “esa noche fue como vivir la guerra. Las horas del paso del huracán fueron aterradoras, pero nosotros nos mantuvimos unidos cumpliendo con nuestro trabajo, convencidos de que aquello pasaría e íbamos a salir adelante”.

“Cuando colapsaron los canales de comunicación no sabíamos qué hacer para seguir brindando información al país. Usamos incluso correo Nauta hasta que fue posible el acceso a un teléfono satelital, lo importante era seguir reportando”, agregó Noa Faez, quien asegura fue esta su prueba de fuego como periodista.

Para la Jefa de Programación de La Voz del Toa fue un golpe de suerte mantener la comunicación durante el paso del evento meteorológico. “De este modo se aseguró la trasmisión para otras partes del país, y dentro de Baracoa por frecuencia modulada (FM), señal que puede ser captada por teléfonos celulares, radios móviles u otros dispositivos de este tipo”.

“Durante esta noche tan larga -recuerda la Jefa del Grupo Informativo de Radio Baracoa Maricel Reyes Pérez- la experiencia de eventos anteriores sirvió sin dudas para saber cómo reaccionar. Nosotros mudamos el campamento y nos dedicamos por completo a informar a la población.

“Con la familia a cuestas –aquellos que no tenían otra opción- mudaron la casa hacia la emisora, que además sirvió de centro de evacuación para vecinos cuyas viviendas no eran resistentes”.

Con lágrimas en los ojos y un nudo en la garganta concluyó: “Nosotros creímos que no amanecía. Nunca vimos algo así, pensé que no quedaría casa alguna en Baracoa”.

maricel reyesLa periodista Maricel Reyes relató a Venceremos los tensos momentos vividos durante el paso del huracán Matthew por la Villa Primada. Fotos: Daniel Ross Diéguez

  El amanecer tras la noche más larga

“Aquella terrible madrugada en que no dormimos intentaba hacer una crónica de lo que sucedía y solo me llegaba a la mente el título de la novela Y si muero mañana”, rememoróArelis Alba y agrega: “Pero el horror más grande fue cuando vimos, al día siguiente, cómo había quedado la ciudad. Yo creí que estaba preparada psicológicamente para verlo pero no era así. Aunque sabíamos que todo había pasado, no parecía amanecer nunca.

En penumbras hicimos las primeras fotos del desastre, replicadas luego en perfiles personales en Internet, medios de comunicación y agencias de noticias”.

Los periodistas de la televisión coincidieron en que lo más duro fue ver cómo quedaba Baracoa. Al amanecer salieron cámara en mano y con libreta de apuntes, buscando desesperados cómo hacer llegar las noticias de lo ocurrido. “Fue un golpe terrible, describe Mavel, parecía que habían bombardeado la ciudad. Pero lo que más impactaban eran los rostros de los baracoenses. El desconcierto reinaba entonces en la calle”.

“Nosotros sentimos un amor inmenso por Baracoa, y verla en penumbras es doloroso. Esa ciudad bella de cinco siglos se perjudicó en horas, sobre todo su naturaleza exuberante y su casco histórico. Sin embargo los mensajes de aliento y solidaridad recibidos paliaron el golpe.

“No hubo emisora en el país de la cual no recibiéramos una llamada. Y tras la emisión del parte de lo que sucedía en la ciudad, iba el mensaje de aliento y apoyo de nuestros colegas. Hubo momentos en que los tres teléfonos simultáneos trasmitían para diferentes estaciones. Fue un gran reto, pero también una gran satisfacción porque todos se preocupaban por nosotros y por Baracoa”, comentó emocionada la periodista Maricel Reyes.

Al respecto agregó Leandris Noa: “Profesionales de los medios de comunicación en otras provincias que incluso no nos conocen, nos brindaron en ese momento su apoyo y trabajaron también en cadena informativa nacional para mantener a todos al tanto de lo que sucedía en esta parte del oriente cubano, eso se agradece mucho”.

En la red de redes

El flujo de información a través del sitio oficial Radio Baracoa en Internet y sus redes sociales, sobre todo Facebook y Twitter, fue constante. Era una avalancha de mensajes desde distintos lugares de Cuba y el mundo intercambiando datos, pues se trasmitía en tiempo real lo que estaba pasando.

Los techos volando, los postes cayendo, la incertidumbre, la fuerza del viento, fueron reseñados en las páginas de los periodistas.

Alba Cobas comentó al respecto: “Como es característico en la red la información fluyó en múltiples sentidos. Nosotros trasmitíamos lo que sentíamos y escuchábamos, pero la gente que estaba conectada iba monitoreando las trasmisiones de televisión y los partes meteorológicos para orientarnos”.

“Cubanos o extranjeros, baracoenses en otras partes del mundo, amigos, personas que se enteraban poco a poco de lo ocurrido nos solicitaban información en las redes sociales. De hecho fue el canal en YouTube de una periodista, la vía que encontramos para subir algunas informaciones y que fueran descargadas en el telecentro provincial y el sistema informativo” argumentó Lisandra Savó.

leandris noaLeandris Noa Faez, joven reportero de Primada Visión, ha vivido durante esta etapa su prueba de fuego como profesional. Fotos: Daniel Ross Diéguez

Mejores periodistas

La tempestad les ha puesto a prueba y se han superado con creces. “Ahora somos mejores profesionales -subrayó Leandris Noa-. Ha sido difícil porque muchos trabajadores del canal hemos recibido el impacto del ciclón en nuestros propios hogares. Es duro dejar la casa y la familia en estas condiciones, y mantener la ecuanimidad para describir lo que pasa, informar a la población y calmar los ánimos. Pero en ese momento de tensión el enfoque comunitario de la televisora creció y nos convertimos en la fuente más cercana a los acontecimientos. Eso nos aportó extraordinariamente como periodistas”.

“Cuando parecía que se acababa el mundo -comentó la joven periodista Mavel Toirac- y uno tenía en la mente la preocupación por la casa, los amigos, la población en general, fue un momento de crecerse ante la adversidad; en tanto Alba Cobas resalta cómo la emisora devino centro de evacuación, comunicación entre familiares, difusión masiva a través de altavoces, en fin, un espacio multiservicios, siempre del lado del periodismo y la comunidad”.

A ritmo de recuperación

Al cierre de este reporte las filas de personas necesitadas de cargar sus lámparas y dispositivos móviles son interminables en la emisora CMDX La Voz del Toa. Los carros autoparlantes divulgan por la ciudad las principales informaciones y decisiones gubernamentales. Aun se tramitan comunicados familiares.

El ritmo de la trasmisión inmediata, las ediciones en tiempo record y la adrenalina de los pases en vivo aun no cesa para los integrantes del equipo televisivo de Primada Visión, instalado provisionalmente en una de las oficinas del centro territorial de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa).

Es la primera vez que desde Guantánamo se realizan reportes vía satélite, gracias también a la colaboración de Etecsa, el Instituto Cubano de Radio y Televisión y el telecentro provincial Solvisión.

Al huracán siguen las labores de recuperación y la llegada de recursos de todo el país, hechos convertidos también en noticia para Cuba y el mundo.

No ha llegado aún para los profesionales de los medios de comunicación ese momento en que uno descansa y piensa qué hacer, para dónde ir, cómo asimilar las nuevas condiciones de trabajo y vida.

Los periodistas, camarógrafos, editores, realizadores de sonido, productores, asistentes de dirección y personal de servicio de los medios apenas han visto sus viviendas y evaluado sus propios daños, pues el deber los convoca a mantenerse informando. La familia en casa sabe que aman lo que hacen, aunque requiere a veces demasiados sacrificios.

El trabajo es ahora refugio, amigo y deber social. Más fuerte que el huracán es la amistad surgida al calor de la contingencia. Matthew se fue, y sobre su estela, los atrapa la tormenta de la recuperación. Aun en tiempos de ciclón, el periodismo es el mejor oficio del mundo.