La mañana de este sábado, dos drones impactaron las plantas superiores de un edificio residencial en el complejo Lazúrnye Nebesá, en Kazán, Rusia. Los ataques continuaron con al menos cuatro explosiones en otros bloques de viviendas de la ciudad, alcanzando un total de ocho drones. Uno de ellos no logró su objetivo de impactar contra una planta industrial.

Una cámara instalada en un coche captó el impacto del primer dron, que provocó una explosión en la fachada de cristal del edificio. Poco después, un segundo dron generó una explosión mayor, causando un incendio mientras varios residentes se encontraban cerca del lugar.

Los servicios de emergencia y las autoridades locales, encabezadas por el alcalde Ilsur Metshin, han organizado evacuaciones en los edificios afectados y han habilitado alojamientos temporales para los residentes. Se realizaron evacuaciones selectivas en escuelas, donde los niños fueron trasladados a sótanos para resguardarse. Según informes preliminares, no se han registrado heridos entre los habitantes.

El jefe de Tataristán, Rustam Minnijánov, declaró en Telegram que estos ataques representan un cambio de estrategia, pasando de atacar infraestructuras industriales a civiles. Mientras tanto, el Ministerio de Defensa ruso informó que tres drones ucranianos fueron derribados por sistemas de defensa antiaérea, y otros tres neutralizados mediante guerra radioelectrónica. Los ataques se realizaron en tres oleadas desde distintas direcciones.

El aeropuerto de Kazán suspendió temporalmente sus operaciones y se cancelaron todos los eventos públicos en Tataristán durante el fin de semana como medida preventiva. Las autoridades locales continúan evaluando los daños y garantizando la seguridad de los ciudadanos.

Tomado de Cubadebate