Más de nueve mil consultas médicas por infecciones respiratorias agudas (IRA) computó la provincia de Guantánamo entre enero y agosto del presente año, cifra superior al mismo lapso de 2024, lo cual obedeció, en opinión de los especialistas, a la estacionalidad propia de estas patologías y al incrermento de las temperaturas, factores que favorecen la intensidad de la circulación viral.
“Las infecciones respiratorias agudas constituyen un conjunto de enfermedades del aparato respiratorio causadas, fundamentalmente, por virus y bacterias. Su periodo de incubación es de dos a tres días, y suelen ser transmisibles de tres a siete. Tras el inicio de los síntomas, la evolución puede extenderse de diez a quince días, lo que denominamos catarro común o influenza”, explica la doctora Aime Blanco Chivas, jefa de Enfermedades Transmisibles del Centro provincial de Higiene de Guantánamo.
El mecanismo de contagio es principalmente por las partículas de saliva expulsadas al toser o estornudar. “También es de contacto: si alguien toca superficies contaminadas o comparte utensilios con un enfermo, corre el riesgo de infectarse”, añade la especialista.
Entre los territorios más afectados figuran los municipios de Niceto Pérez, Caimanera, Yateras, San Antonio del Sur, Manuel Tames y Guantánamo, último territorio que concentra los mayores reportes en consultorios del médico de la familia. Los grupos de mayor riesgo son los niños de uno a cuatro años y los adultos mayores de 65, segmentos etarios en los cuales se observa el mayor número de casos.
Del estudio de las muestras tomadas en pacientes sintomáticos, se detectó un predominio del virus respiratorio sincicial, principal responsable de bronquiolitis en infantes, así como la influenza AH1N1 y el rinovirus. En menor medida se registra SARS-CoV-2, causante del COVID-19, aunque sus manifestaciones clínicas actuales son más leves.
Ante esta situación, las autoridades de salud han reforzado los protocolos de atención y vigilancia epidemiológica en toda la red asistencial, desde los consultorios del médico de la familia hasta los hospitales y servicios de urgencia. Asimismo, se intensifican las acciones de educación sanitaria y promoción de salud, con el fin de prevenir nuevos contagios.
“Es fundamental que la población acuda oportunamente a su médico de familia o al cuerpo de guardia del policlínico ante la aparición de síntomas respiratorios”, indicó Blanco Chivas, quien también exhortó a mantener el lavado de manos frecuente, evitar el hacinamiento, ventilar los espacios cerrados correctamente y consumir agua tratada para prevenir complicaciones asociadas.
Como parte de las estrategias de prevención, se reiteró la importancia de completar el esquema de vacunación anti-COVID-19, “Contamos con dosis necesarias para garantizar la inmunización. La vacuna es una herramienta clave para evitar complicaciones graves del COVID-19, que tanto impacto trajo a nuestras familias y al sistema sanitario”, subrayó la especialista.
En medio del calor veraniego y el aumento de la circulación viral, las autoridades insisten en no subestimar los síntomas y mantenerse vigilantes ante la evolución de esta situación epidemiológica, que no solo impacta en la salud individual, sino en los servicios asistenciales del territorio.