El Teatro Aurelio de Roma vibró con una celebración sin precedentes: Danzas del Mundo, Amistad sin Fronteras. Este evento único subrayó el poder transformador de la cultura para fomentar el entendimiento y la conexión entre las comunidades globales.
Organizado por Timbalaye, reconocido promotor internacional de la cultura cubana, la velada reunió a talentos excepcionales que deleitaron al público con un mosaico de danzas y músicas representativas de países como Cuba, México, Perú, Colombia e Italia.
Un despliegue artístico de diversidad
El programa incluyó vibrantes danzas folclóricas de diferentes rincones del mundo, hipnotizantes presentaciones de danza del vientre, la energía y emotividad de un mariachi en vivo, entre otros números.
Entre los artistas destacados estuvieron los alumnos de la escuela Clave de Son, bajo la dirección de Irma Castillo y Ulises Mora; CEGUFOLK conservando tradición APS, liderado por Jonh Cesar Gutierrez y Daniel Méndez Valencia de Colombia; junto a talentosas bailarinas independientes como Monserrat Zamudio, Ana Selena Carravetta y Margarita Borzelli González. La música estuvo a cargo del icónico grupo Mariachi Roma, con la participación especial de Antonella Serafini.
Mensaje de unión y esperanza
Con una audiencia que llenó las 180 localidades del teatro, el evento culminó de manera emotiva con la interpretación de la Guantanamera y un desfile de banderas que unió a los asistentes en un grito común: "¡Viva Cuba, Italia, México, Colombia, Perú!".
Durante el cierre, Irma Castillo y Ulises Mora ofrecieron reflexiones inspiradoras: Castillo destacó la necesidad de trabajar por un mundo mejor, mientras que Mora evocó la danza, la música y la poesía como herramientas esenciales para construir un diálogo de paz.
Puente hacia el entendimiento mutuo
Más que un espectáculo, Danzas del Mundo, Amistad sin Fronteras fue un recordatorio del papel vital que desempeñan las expresiones artísticas en la creación de un mundo más inclusivo y empático.
Tomado de Cubadebate