China se opone firmemente a las amenazas, chantajes y presiones estadounidenses que emplean la cuestión del fentanilo como excusa, afirmaron funcionarios del Ministerio de Seguridad Pública del gigante asiático, este miércoles.
La imposición de aranceles a productos chinos socava la cooperación bilateral y constituye un acto de presión y chantaje, trascendió.
La nación asiática ha realizado hechos sólidos que confirman la seriedad de su lucha contra el fentanilo, por lo que rechaza las acusaciones y medidas adoptadas recientemente por el Gobierno de EE.UU.
En los últimos años, ambos países han fortalecido su labor conjunta en la lucha contra el narcotráfico, lo que ha sido esencial, a juicio de los funcionarios de la nación asiática.
En 2019, China clasificó todas las sustancias relacionadas con el fentanilo, a pedido de EE. UU., y fue el primer país del mundo en hacerlo.
Entre las principales actividades de cooperación se encuentran las visitas de alto nivel en el último año y el perfeccionamiento del intercambio de información entre los investigadores.
Sin embargo, usar el fentanilo como excusa para aumentar los aranceles no solucionará las dificultades; en cambio, responde injustificadamente con hostilidad a la cooperación.
China considera que el Gobierno norteamericano está «reflejando» sus propios problemas, y destacan el cumplimiento de las obligaciones de la nación asiática en términos de control de drogas. Se enfatizó en que el país se encuentra libre de abuso de sustancias con fentanilo.
Las declaraciones y medidas estadounidenses, por tanto, socavan los vínculos conjuntos en este ámbito. China está dispuesta a seguir cooperando en un ambiente de respeto mutuo e igualdad, pero también se opone categóricamente a las presiones norteamericanas.
De igual manera, ha ofrecido su apoyo humanitario a EE. UU. para dar respuesta a las afectaciones humanas que provoca esta cuestión.
Recientemente, la nación asiática publicó el informe «Control de sustancias relacionadas con el fentanilo: Contribución de China», en el cual se destaca la «tolerancia cero» de este país hacia las drogas.
En ocasiones anteriores, autoridades y funcionarios han hecho referencia a los estrictos controles existentes, y calificaron a la nación asiática como «uno de los países más duros del mundo» en la lucha contra los narcóticos, tanto a nivel de políticas como de implementación.
El país, comprometido con su visión de futuro compartido para la Humanidad, exhorta a la lucha global e integral contra este fenómeno.
Tomado de Granma
