Mientras las ruedas avanzan por el centro de la ciudad el tren que transporta ganado hacia el combinado cárnico de Guantánamo reduce su velocidad. El show está a punto de comenzar y algunos aprovechan incluso el transporte que traslada a esos animales para llegar al destino y protagonizar los episodios que ya se vuelven costumbre.
Frente al mencionado combinado la acción comienza y el argumento de la trama se sostiene en la constante burla al peligro, un placer envuelto en pasatiempo de no pocos jóvenes y adolescentes que se suben a la parte superior de las celdas en que los animales han hecho el viaje, la provocación a los cuadrúpedos se vuelve deleite exquisito.
Si es fin de semana hay mayores garantías de ser un espectador asombrado de lo que allí sucede, basta pasar por la calle Pedro Agustín Pérez entre 7 y 8 Sur, los hechos hablan frente a los ojos. El espectáculo incluye alborotar al ganado con piedras, algo que si alguien se atreviera a definir como “cosa de muchachos”, el destino puede que se lo cobre caro con una sorpresa.
Frente a la problemática la Empresa Cárnica ha solicitado ayuda y aunque Ruberley Correoso Mustelier, Jefe de Seguridad y Protección en esta unidad reconoce que la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y el Ministerio del Interior han colaborado en el enfrentamiento a hechos delictivos, ya manifestaron que no es su responsabilidad intervenir en este último asunto.
A pesar de esto durante la investigación previa a este comentario hubo trabajadores del cárnico que sí atestiguaron el control sistemático y efectivo de la policía durante un tiempo, aunque ya no sea así y la cuestión se complejice e incluso tengan recuerdos de varios toros sueltos en la vía no pocas ocasiones y hasta una ciudadana lesionada.
Frente a la soledad de la entidad para controlar los hechos, la decisión ha sido poner su personal de seguridad en función de contrarrestar la indisciplina, a pesar de que tengan que movilizar custodios de otras áreas del local; no obstante para muchos se impone la pregunta sobre si es este el equipo adecuado de cara a las dimensiones que ha cobrado el asunto.
En medio de las responsabilidades para combatir los hechos hay muchos factores a tener en cuenta: ¿dónde está la familia de quienes asumen conductas tan imprudentes, incluso contra sus propias vidas? qué hacen los padres de los adolescentes y menores que desafían a los animales en una burla en la que la sangre, el dolor y el susto pueden ser un día el precio a pagar.
Amerita también reflexión el papel que pude asumir los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) de esa zona y el delegado de circunscripción, para buscar formas de precaver males mayores, porque es una tarea que necesariamente demanda involucrar varios actores. Solo así será posible desterrar el temor de quienes acudieron a este reportero preocupados por el tema.
Según lo investigado la propia estructura del combinado atenta contra situaciones complejas en el traslado de los animales al interior de la unidad, puesto a diferencia de lo que sucede en otras provincias, el tren no puede penetrar al centro y hay que obrar desde afuera para que los animales sean introducidos al lugar, en varias ocasiones algunos cuadrúpedos han escapado.
Ante la violación de quienes desafían de cerca el peligro a riesgo de multiplicarlo para otros, la tranquilidad demanda medidas ejemplarizantes contra esos que asumen como entretenimiento la provocación al ganado, mientras cualquier espectador casual teme y se preocupa. Por el momento la calma se suma a la espera de acciones que finalmente logren poner coto al asunto.