Cómo combatir los parásitos intestinales es constante preocupación de los padres, pues por mucho que se esfuercen en tratar de impedir que los niños se lleven las manos sucias a la boca, generalmente se infectan, por lo que es necesario realizarles estudios sistemáticos con sus respectivos tratamientos farmacológicos.
Lo primero es acudir al médico de familia ante síntomas como comezón en la vagina o el ano, diarreas, insomnio, náuseas, dolor abdominal, estreñimiento… para que indique exámenes que diagnostiquen la presencia de parásitos y tratarlos inmediatamente; se recomienda someterse a estudios para detectar el parasitismo por lo menos dos veces al año.
Por lo pronto les aconsejamos algunas recetas sanas, entre ellas, la elaborada con semillas y tripas de calabaza, un vegetal sin contraindicaciones y muy nutritivo, rico en de vitaminas A, B3, E, K zinc, hierro, ácido fólico…, también contiene curcubitina (aminoácido que paraliza los parásitos intestinales y propicia su evacuación). Ahí les va:
*Hervir un litro de agua y cuando esté a punto de ebullición agregar la pulpa y semillas de calabaza y esperar a que se reduzca a la mitad el agua para apagar el fuego. Dejar enfriar y luego batir y colar, puede agregársele miel y algunos dientes de ajo machacados. Tomar una o dos cucharadas diarias en ayunas durante siete días, descansar tres y repetir el tratamiento.
*Otra alternativa puede ser ingerir un diente de ajo crudo en ayunas, o bien consumir 10 semillas de calabaza crudas o tostadas diariamente por siete días, descansar y repetir la dosis. Tiene propiedades antibacterianas, es rico en calcio, fósforo, hierro, vitaminas C y B1, entre otras, también es antinflamatorio y antioxidante.