Retamar durante la ceremonia. Foto: Danae González
La creación de una obra literaria y, muy particularmente, su poesía, que demostró que desde una dimensión lírica se puede conjugar lo cotidiano con lo trascendente, y los aportes ensayísticos al pensamiento antihegemónico y anticolonialista, expresados particularmente en su obra Caliban, fueron razones que avaló el acta, leída por Miguel Barnet, presidente de la Fundación, quien además entregó el diploma que amerita el reconocimiento y el Adyá que acompaña al premio.
Otros imperativos para el otorgamiento esgrimen que “como auténtico cubano y latinoamericano caló hondo como pocos en el pensamiento martiano” y que “desde su juventud fue un estudioso de la obra de Fernando Ortiz”.
Aché para Roberto Fernández Retamar fue el título de las palabras de elogio a cargo del doctor Félix Julio Alfonso, quien consideró al maestro como el más brillante de los intelectuales cubanos vivos y una de las cumbres de la cultura latinoamericana.
En sus palabras recorrió, en una apretada síntesis, los sitios más significativos de la obra ensayística y poética del agasajado y expresó que con solo tener en cuenta la zona de su obra anticolonialista, antirracista, antimperialista y de una eticidad superior, desplegada en textos como “el iluminador ensayo Martí en su (tercer) mundo, y el paradigmático Caliban, entre otros de similar naturaleza emancipadora”, habrían bastado para concederle el premio “como sobresaliente estudioso de las ciencias sociales y humanas; y continuador de los estudios culturales cubanos, camino abierto en nuestra patria por don Fernando Ortiz”.
Las palabras tocaron también la zona esencial de la poesía de Retamar y refirieron los momentos puntuales en que el prominente intelectual ha dialogado con la obra de Don Fernando.
Retamar agradeció notablemente emocionado el galardón y reconoció que su obra estuvo desde sus inicios influenciada por el pensamiento de Fernando Ortiz. En la ceremonia se encontraban Abel Prieto Jiménez, asesor del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros; Eusebio Leal Spengler, Historiador de la Ciudad; Fernando Rojas, viceministro de Cultura, así como personalidades del ámbito académico y cultural.
Fuente: Periódico Granma
