Ya lo dice el refrán: guarde pan para mayo y maloja para su caballo. Una expresión de la sabiduría popular que invita a tomar provisiones, pues es tiempo históricamente lluvioso. Este 2018 no ha sido la excepción.
Hasta el día 22 la provincia acumula, como promedio, 179 milímetros (mm) de precipitaciones, lo que supone un mes “extremadamente húmedo”, según la escala del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, que denomina así los lapsos de 30 días con marcas superiores a 175 mm.
Por cantidad de lluvia–precisó la subdelegada técnica de Recursos Hidráulicos, Yinet Marzo Manuel- los mayores valores se registran en los municipios de Yateras, con más de 270 mm, cifra que representa el 94 por ciento de su media histórica y El Salvador, al 100,9 por ciento de su promedio tradicional, con 221,9 mm.
Maisí, por su parte, supera con creces los parámetros, al reportar 216 mm de precipitaciones, lo que equivale al 128 por ciento de la media. Mientras, los menos favorecidos son Caimanera e Imías, que se han beneficiado con 52,2 mm y 59,4 mm respectivamente.
Sin embargo, los territorios donde se registra mayor cantidad de lluvia no coinciden con la existencia de embalses u otras formas de acumulación del líquido vital, por lo que esas precipitaciones no se guardan para venideros tiempos de seca; aunque –aseguró la subdelegada- existen obras de captación y estaciones de bombeo con la cuales se ha mantenido constante el servicio de abasto de agua a la población y las entidades, previas acciones de tratamiento para mejorar su calidad.
Solo en Baracoa, producto de la turbidez de las aguas por la crecida de los ríos, fue afectado el servicio varios días.
En relación con los acumulados en embalses, Faustino Pérez, que abastece a gran parte de la ciudad de Guantánamo, está al 96 por ciento de su capacidad, mientras la Yaya, la más grande de la provincia, y que abastece a la zona Sur del municipio cabecera incluido el polo industrial, está al 47,38 por ciento y Jaibo al 49,6.
En San Antonio del Sur, las presas Los Asientos y Pozo Azul, acumulan el 88 y 56 por cientos respectivamente.
Con estas cifras –precisó Marzo Manuel- está garantizada la entrega de agua por un año a la población, entidades industriales y la agricultura.
