Avanzar en la vacunación masiva con el inmunógeno Abdala en el municipio de Guantánamo fue el principal llamado que realizaron las autoridades de la provincia en el Grupo Temporal de Trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus, que en esta ocasión estuvo presidido por el miembro del Secretariado del Comité Central del Partido, José Ramón Monteagudo Ruíz, y el Primer Vice Primer Ministro, Jorge Luis Perdomo Di-Lella.
Si bien se ha logrado que más de 2 mil 570 gestantes y 2 mil 831 madres que están lactando reciban la primera dosis, aún la intervención está lejos de cumplir las expectativas justo al onceno día de su inicio. De hecho según fuentes de Salud Pública faltan más de 6 mil guantanameros por acudir a los sitios clínicos, la mayoría de ellos residentes de la zona Sur.
Rafael Pérez Fernández, miembro del Comité Central del Partido y su Primer Secretario en Guantánamo, precisó que si es necesario cada organismo que apadrina a los sitios clínicos ponga a sus trabajadores junto con los factores de la comunidad para buscar a los ciudadanos que aún no se han vacunado, pues hay que unirse ahora para que fluya con organicidad y rapidez el proceso.
Por otra parte, al conocer que de las 3 mil 512 pacientes ingresados con COVID-19 -mil 616 están en su domicilio-, Emilio Matos Mosqueda, gobernador del Alto Oriente cubano, insistió en comprobar que se esté cumpliendo el protocolo de atención médica y revisar los mecanismos para garantizar el ingreso de los positivos al SarsCov2 y los sospechosos de alto riesgo como prioridad.
En el encuentro se señaló como obstáculo en la actual estrategia de manejo de la pandemia la negativa de muchos pobladores a trasladarse a un centro de aislamiento, ante lo cual Matos Mosqueda dijo que hay tomar todas las medidas para cumplir lo establecido, pero, además, seguir mejorando la calidad de las prestaciones en nuestras instalaciones médicas.
José Ramón Monteagudo, quien preside un equipo para supervisar el trabajo de la provincia, afirmó que Guantánamo debe resolver el problema organizativo que tiene, para lo cual necesita nutrirse más de las opiniones del pueblo y solucionarlas, solo así se podrán cerrar brechas en esta lucha por la vida.
Ramón Monteagudo explicó que hay cuestiones que dependen solo del control y la disciplina de los que dirigen cada institución: las dificultades en los cuerpos de guardia médica, la calidad de los alimentos en los centros de aislamiento, el suministro de medicamentos a pacientes ingresados, la atención al ingreso domiciliario... todos tienen a un responsable al frente, que debe responder por ello administrativamente y solicitar ayuda de inmediato si es necesario.
Como parte de los aseguramientos contra el nuevo coronavirus se anunció la creación de una brigada provincial para la desinfección de las viviendas de casos confirmados con COVID-19, y de las instituciones cercanas para eliminar los focos de infección en las comunidades.
Esta semana arribará otro grupo de médicos internacionalistas que cumplían misiones en Panamá y que vienen a colaborar con el personal de Guantánamo.
Todas esas acciones deberán contribuir al control de la enfermedad, acompañadas siempre del respaldo popular, algo imprescindible justo cuando se experimenta la mayor alza de contagios y fallecidos en el territorio. Los municipios más complejos son Caimanera, Guantánamo, Manuel Tames y El Salvador.
Se controlan 384 focos en las comunidades y se vigilan 22 eventos de transmisión local del nuevo coronavirus: 11 de El Salvador y siete de Baracoa.
El Grupo Temporal provincial analizó igualmente la situación de los medicamentos, pues persiste poca disponibilidad de Interferón, relajantes musculares, esteroides y antibióticos, aunque se han recibido insumos como Nasalferón y test de antígenos, aún insuficientes para la actual demanda.