Foto: Lorenzo Crespo Silveira
Las clases empezarán en todas las escuelas cubanas hoy 5 de septiembre.
Más de 93 mil estudiantes de las diferentes enseñanzas y más de 11 mil docentes, en la educación general, acudirán a las aulas en Guantánamo a partir de este día, así como otros miles en la Educación Superior, en el curso 2016-2017.
Es emocionante en sí mismo el espectáculo de toda la niñez y la adolescencia y de gran parte de la juventud cubana, guantanamera en este caso, marchando a aprender más desde cada septiembre.
Una fiesta posible desde hace más de cinco décadas, por el empeño de la Revolución en garantizar el derecho conquistado de la educación universal y gratuita para los hijos de los trabajadores de la Patria.
Día feliz en el que se compromete y al que comparece toda la sociedad, cada familia, porque el abrazo de la escuela se reparte unánime, no solo a los alumnos y los maestros y profesores, sino a cada una de las personas del pueblo, cada una de las cuales siempre tiene algún allegado que se involucra en el torneo de enseñar y aprender.
El propio hecho del inicio del curso escolar tiene la condición de uno de los mejores regalos que pueda recibir Fidel, por su reciente cumpleaños 90, pues el líder de la Revolución ha sido generador y permanente enriquecedor de la obra educacional cubana en beneficio de la nación y del mundo, en cumplimiento del legado pedagógico martiano.
Los guantanameros, que han sabido enaltecer esa obra con orgullo, empiezan la nueva etapa en mejores condiciones materiales y subjetivas que el curso anterior, en el cual lograron ser reconocidos entre las tres provincias destacadas del país por su Educación.
Desde el primer día, por eso, el compromiso y el reto de cada estudiante y docente se acrecienta en la calidad con que se enseña y el interés puesto en aprender, para, por ejemplo, crecer aún más en el por ciento de aprobados en los exámenes de ingreso a la Educación Superior y en los resultados de concursos.
Junto al conocer más y mejor de las materias del programa, la escuela, la familia y la comunidad comparten la obligación de sembrar y desarrollar actitudes y valores ciudadanos, desde el cumplimiento del reglamento escolar, el correcto uso del uniforme, el estudio independiente y la disciplina social, que deben distinguir a los escolares cubanos, actuando preventivamente de conjunto contra el desarrollo de adicciones insanas.
Es posible que el día feliz que está llegando lo sea aún más y se prolongue a lo largo de todo el curso si los que en él se empeñan lo asumen con toda la organización, responsabilidad, entrega y dedicación.
Vayamos a las aulas con la disposición de que cada día sea un gran día para la Educación guantanamera desde hoy, 5 de septiembre.
