reparando sueñosLa instructora de arte Niurka Cala Tamayo afirma que el proyecto Reparando Sueños se ha ganado el apoyo y respeto de las instituciones de Niceto Pérez. Foto: Lorenzo Crespo Silveira.

Justamente allí, donde la tierra celosa guarda una parte de la historia de las luchas mambisas en este territorio, y donde se yergue orgulloso el nombre del líder campesino Niceto Pérez, surge Reparando Sueños, proyecto comunitario que al decir de Niurka Cala Tamayo, una de sus integrantes más activas, fue el primero de su tipo en ese municipio.

Según la joven instructora de arte, el objetivo fundamental de la iniciativa, nacida en la Yaya, cabecera de ese municipio, y compuesta por nicetenses de diferentes edades y ocupaciones, se enfoca fundamentalmente en “alegrar la vida y el corazón de sus pobladores”.

“Para ello -nos dice- se escudan en un reducido, pero empeñado colectivo, cuyos pasos recorren a diario los senderos de esta geografía, llevando por ellos las travesuras del enanito reparador de Silvio Rodríguez, de cuya canción, nació el nombre”.

Precisamente, con la intensión de conocer más de lo qué hacen y quiénes son, Lomerío conversó con ella, también para que nos cuente, por dónde andan los pasos de sus otros compañeros.

¿Reparador de Sueños, qué es y quiénes lo integran??

“Esta iniciativa, nacida en agosto del 2011 por la voluntad de hacer de un grupo de instructores de arte, surge por la necesidad de mejorar la vida de los lugareños, siempre en función de garantizar su bienestar, y para alejarlos de algún modo, de las problemáticas de la cotidianidad rural.

“Lo integramos siete instructores de arte y cuatro artistas aficionados de la comunidad, entre ellos trabajadores del Minint, profesores de computación y un cuentapropista, además de contar con el apoyo de la Dirección municipal de Cultura, partícipe también de nuestras travesuras”.

¿Precisamente, qué “travesuras” son las que realizan?

“Hacemos talleres de las diferentes manifestaciones artísticas, de apreciación o de creación. También ofrecemos charlas para la formación de valores, promocionamos libros con el acompañamiento de instituciones invitadas, como la biblioteca y el museo local, y nos vinculamos con el Índer en sus actividades deportivas y recreativas.

“Pero el fuerte del trabajo nuestro es principalmente con los niños y niñas de las escuelas primarias en los que incentivamos el amor por el canto, el baile, la pintura y la danza”.

¿Qué valores defienden?

“Por encima de todas las cosas, la responsabilidad, la honestidad y fomentamos la amistad. Trasmitir cosas buenas por medio de la creatividad es también parte de nuestro trabajo formador. Además de inculcar en los pequeños la valía de ser fieles a nuestras ideas y aspiraciones”.

¿Por qué esa línea de trabajo?

“La escogimos, porque lo que hacemos es revitalizar nuestra herencia cultural, como cubanos y guantanameros; defender la identidad tratando de expandir el conocimiento de ella por el mayor número de zonas posibles.

“Gracias a ello, hemos ganado el apoyo y respeto de las instituciones locales, evidenciado en que la representación del proyecto está en todas las actividades que se realizan en el municipio.

“El tronco fundamental de nuestro trabajo es la cultura popular, defendiendo lo tradicional y revitalizando lo autóctono, lo propio y ese deseo lo compartimos con la gente de acá, interesada también en mantener sus raíces. Creo que eso es lo que más nos identifica y nos diferencia de otros proyectos”.

¿Cómo se puede llegar a integrarlo?

“En sí es para jóvenes, aunque pueden integrarlo personas que tengan vocación o afinidad por alguna de las manifestaciones artísticas, siempre y cuando mantengan la disciplina, la responsabilidad y demás valores éticos y morales que deben caracterizar, principalmente a las retoñas generaciones”.

¿Cómo les fue el 2014, qué “travesuras” harán en el presente año?

“El año 2014 fue bueno. En primer lugar, porque nos enriquecimos al crear dentro del mismo proyecto un grupo de teatro de zancos, el que atiendo personalmente. Por otra parte, el pasado año llegamos a las comunidades de Maca Arriba, Casimba, Vilorio, El Silencio, al municipio Caimanera y otras, en las que nunca habíamos tenido incidencia por problemas de transporte.

Además, se reconoció nuestra labor en el Festival de Tradiciones Campesinas, en la Jornada de la Cultura y en los carnavales locales”.     

Para el 2015 tenemos muchas “travesuras” planificadas, entre ellas llegar a un mayor número de lugares para posibilitar que nos conozcan, que en la provincia se conozca nuestro trabajo, porque todavía no tenemos la cobertura amplia de llegar a todo el mundo y que la gente sepa lo que hacemos.

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