racismo analisis

Luchar desde la cultura contra la persistencia de cualquier tipo de discriminación lesiva a la dignidad humana en nuestra sociedad –no sólo el racismo, como, precisamente por ignorancia, algunos creen-, sostiene el quehacer de la comisión Aponte, que anima la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) en la provincia, desde enero del 2015.

Síntoma del progreso de esa cultura de relación en Guantánamo, fue su más reciente encuentro, en el cual departieron representantes de organizaciones y grupos sociales cuya labor incide en la temática: organizaciones políticas y de masa, fraternales y religiosas, artistas, funcionarios culturales, educadores formales e informales, comunicadores…

 

Crecen así en cantidad y variedad, de uno a otro, estos encuentros bimestrales convocados desde la Uneac por la periodista y realizadora radial Martha Reyes Noa, coordinadora de la comisión que lleva el nombre de José Antonio Aponte, el abolicionista cubano que aportó hasta su vida como líder de la primera conspiración de carácter nacional contra el colonialismo español, hace más de 200 años.

 

Con amplia experiencia como investigador, conferencista y docente, el actual profesor de la Universidad de Ciencias Médicas de Guantánamo, Mario José (Mayito) Montero Campello proveyó el centro de reflexión en este caso.

 

El profesor disertó acerca del enfrentamiento actual de la humanidad al racismo y sus consecuencias, la radical obra abolicionista de la Revolución Cubana, incluyendo pronunciamientos al respecto de personalidades, incluidas nacionales, y datos precisos de la composición étnica y hasta genómica de la población cubana y guantanamera.

 

Como académico de la sociología, Montero consideró que el racismo y la racialidad, más allá de las justicieras conquistas de la Revolución y el Socialismo para todos los ciudadanos, tienen un debate real y pertinente en la sociedad cubana, el cual no está presente en los medios de difusión masiva.

 

Amén de puntualizaciones a este intencionado señalamiento, cada intervención aportó a la reunión la confirmación que declara constitucionalmente el logro presente de la voluntad de los ciudadanos cubanos del anhelo martiano: “Yo quiero que la ley primera de nuestra República sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre”, entendido este último como especie, por supuesto.

 

Esta reunión de la comisión Aponte en Guantánamo, resultó expresión esencial de lo que se reconoce como el encuentro de la igualdad de diversos en nuestra cultura, como lo señala el Artículo 40 del Proyecto de Constitución que se somete a la consulta popular en estos días, y que explicita:

 

“Todas las personas son iguales ante la ley, están sujetas a iguales deberes, reciben la misma protección y trato por las autoridades y gozan de los mismos derechos, libertades y oportunidades, sin ninguna discriminación por razones de sexo, género, orientación sexual, identidad de género, origen étnico, color de la piel, creencia religiosa, discapacidad, origen nacional o cualquier otra distinción lesiva a la dignidad humana.”

 

La cultura de relación debe seguir conquistando mentes desde la comisión Aponte.

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