Titerenando en la ciudadLa muestra de tres espectáculos protagonizados por el muñeco Polichinela, justo en el bulevar de la ciudad de Guantánamo, fruto del taller sobre esta técnica de trabajo impartido en la sede de Danza Fragmentada por el artista Víctor Ariosa, constituyó uno de los principales atractivos de la tercera jornada del encuentro de jóvenes marionetistas que se desarrolla en el Alto Oriente por estos días.

 

El espectáculo captó la atención y los aplausos de más de una decena de personas, quienes se detenían a disfrutar con las travesuras e historias del títere italiano.

Este mismo día también concluyeron las clases sobre Máscaras para actores, y de animación con títeres de mesa, encargadas al profesor del Instituto Superior de Arte, Ariel Bouza Quintero y la actriz Arazay Suarez, quienes propusieron novedosas formas para experimentar y perfeccionar el trabajo actoral.

Durante la tarde correspondió a los grupos invitados la presentación de obras como Las descabelladas historias de Polichinela en La Habana y Juanin y Tun Tun, Paradigma o ¡Ay Shakira!, Sueño de papel, Eleguá y sus historias, Niños de Papel… que muestran el quehacer de los jóvenes titiriteros en el archipiélago.

En el día de ayer se exhibió la exposición Armando entre el mar y las montañas con diseños, muñequería y retablos concebidos por el maestro Armando Morales para puestas en escenas con el Teatro Guiñol de Guantánamo.

La muestra, abierta en la sala alternativa del Guiñol, recoge la estética que el maestro defendió en los montajes de las obras con el grupo teatral guantanamero. Los personajes, confeccionados de manera artesanal, son muestra de esa atractiva visualidad que prevalecía en sus trabajos.

Expo armando morales

En la emotiva apertura se resaltó el estrecho vínculo del maestro con el Guiñol Guantánamo, en la dirección de obras como De Don Cristóbal y Doña Rosita, de Federico García Lorca y Pelusín de la esperanza, una versión de Esther Suárez sobre el original de Dora Alonso, lo que permitió la visualización del grupo guantanamero en el panorama teatral del archipiélago.

“El trabajo con el Maestro dio al Guiñol de Guantánamo un carácter profesional y un mayor rigor a la hora de asumir la escena en la ciudad y la montaña”, señaló Yosmel López Ortiz, vicepresidente de la Asociación Hermanos Saíz en Guantánamo.

Emilio Vizcaíno, director de la Cruzada Teatral Guantánamo – Baracoa, resaltó la participación de Armando Morales en las serranías guantanameras, aún cuando tenía limitaciones impuestas por su salud y los años.

Merecido homenaje que el Titereando en la ciudad rinde al también investigador teatral y teórico del arte, cuya obra y enseñanzas irradian en los talleres de la presente edición del evento.

López Ortiz adelantó sobre la creación de una galería bajo el nombre de Armando Morales en la sala teatro Guiñol y subrayó la necesidad de rescatar los repertorios y reeditar las publicaciones para que las nuevas generaciones accedan al legado escrito o visual del Maestro.

 

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