Más de 17 mil personas visitaron el Zoo de los Iñigo el pasado año. Foto: Ariel Soler Costafreda

El complejo escultórico Zoológico de Piedra, ubicado en las serranías del municipio Manuel Tames, en Guantánamo, es sometido a un proceso restaurador estimado en 129 mil pesos, de ellos 65 mil 100 en moneda convertible, como parte de un proyecto de iniciativa municipal para el desarrollo de la localidad.

La instalación, declarada hace 30 años Patrimonio de la Cultura Nacional, prevé en sus inversiones la restauración y mantenimiento de las esculturas, las que serán protegidas de la acción de la humedad y los musgos con baños de cal y formol, este último químico deficitario en el complejo paisajístico.

Los trabajos incluyen también la identificación de las más de 500 figuras que conforman el parque, así como la señalización del recorrido; crear la página web del zoológico de piedra y publicar una revista impresa, comentó a Venceremos Yoennis Samón Morales, vicepresidente Poder Popular en Manuel Tames.

Se proyecta también la construcción de puntos de ventas de frutas típicas y jugos, y la Casa del Artista, donde se diseñarán y venderán figuras en miniaturas que reproducen la fauna del Zoo, un grato recuerdo para quienes visiten el lugar.

Enclavado en la finca San Lorenzo, el zoológico debe reinaugurarse el 30 de junio, con la terminación de las obras en el restaurante Las Piedras y la transformación de la parrillada.

El Zoológico de Piedra, nació el 21 de diciembre de 1977 del cincel de Ángel Iñigo Blanco (1935-2014) tras esculpir el león, su primera pieza, a la que siguieron más de 450 hasta su última entrega, Maña y fuerza, que a unos 750 metros sobre el nivel del mar, en la cúspide del acogedor paraje, muestra un hombre derribando a un toro.

Angel Iñigo Pérez, es continuador de la obra de su padre, que comenzó a enriquecer con Palenque de Cimarrones y cuenta al Bohío de Guano entre las últimas talladas con las mimas herramientas que heredó del iniciador: hacha, martillo, cincel…

El singular y atractivo Zoológico, enclavado en la Loma de Boquerón, 25 kilómetros al Norte de la ciudad de Guantánamo, fue visitado el pasado año por más de 17 mil personas, entre ellas 587 turistas extranjeros, y recaudó alrededor de 11 mil pesos cubanos y unos 700 en moneda convertible.

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