Los cubanos contribuiremos a controlar el ébola e impedir que se expanda por el mundo, aseguró a Venceremos, entrevistado vía internet, el doctor Leonardo Fernández Fernández, intensivista guantanamero integrante de la Brigada Henry Reeve, que combate contra la terrible pandemia en esa nación africana.
En sus declaraciones agradeció, a nombre de la brigada médica, las muestras desde la Isla y mundiales de solidaridad y apoyo recibidas en Liberia, Guinea Conakry y Sierra Leona tras conocerse la triste noticia de la infección contraída por el doctor Félix Báez Sarría.
Subrayó la estrecha relación y cooperación existentes entre todos los internacionalistas cubanos, que constituyen una gran familia en tan extremas condiciones de trabajo y destacó la preocupación de la Organización Mundial de la Salud y autoridades por la seguridad humana, y la exigencia por el cumplimiento riguroso de las medidas de protección.
El máster y especialista de segundo grado en Emergencias Médicas y Terapia Intensiva, aseguró que todos los cubanos involucrados en la cruzada mundial contra el ébola son tan conscientes de los riesgos que supone la misión, como de la responsabilidad que tienen como médicos de la Mayor de las Antillas, formados por la Revolución en los principios de la solidaridad y el internacionalismo de enfrentar y eliminar la contagiosa enfermedad en el mismo escenario del surgimiento.
Junto al doctor Fernández Fernández brindan también sus aportes en Liberia los guantanameros Eddie Rodríguez Rodríguez, del Banco de Sangre de Baracoa; y los enfermeros Omar Coy Rodríguez, del policlínico de Caimanera; Lázaro de la Cruz Pineda, de Higiene y Epidemiologia, en Baracoa; y Eduardo González Copeyo, de Niceto Pérez.
El pueblo cubano, el Partido, Fidel y Raúl, mis compañeros del Hospital General “Doctor Agostinho Neto” y todos los guantanameros pueden estar seguros de que derrotaremos al ébola, aliviaremos el sufrimiento humano y contribuiremos a que este virus no se extienda por el mundo y cobre la vida de millones de personas. Vale la pena correr el riesgo, luchar y vencer”, transmitió.
Señaló que al cumplirse el primer mes (arribaron 22 de octubre), la moral de la brigada es tan alta, como estrictas las condiciones de vida y trabajo en la Unidad de Tratamiento al Ébola (ETU, por sus siglas en inglés), donde se labora ocho horas, pero solo tres (siempre en dúo) en el área roja, donde están ingresados los pacientes confirmados.
Comentarios
Suscripción de noticias RSS para comentarios de esta entrada.